domingo, 29 de noviembre de 2009

Saber vivir

La tranquilidad que a últimas fechas ha predominado, me ha dado un poquitin de tiempo para meditar circunstancias que me ayuden a mejorar mi vida... y ésta, es una situación que desde hace mucho debí remediar: Por qué me enfoco en aquella persona que me daña y encauso todas mis energias en querer arreglar la situación entre esa personita y yo, en lugar de disfrutar todo lo que hay a mi alrededor?

Ok, admito que a veces las respuestas llegan tarde o simplemente las evado... Pero, bueno, mas vale tarde que nunca.

Un buen dia, despues de estar enojada con el mundo, me propuse no hacerme la vida pesada, y menos con el chaparrito (que es una personita que se niega a crecer) con el cual, simplemente no termino de hacer click y que nos llevemos bien, con defectos y virtudes. El error de el fue querer meterse en un terreno más personal y yo permitírselo. En fin, a la única conclusión que llegué fue que vivimos en mundos muy diferentes, y afortunadamente, me di cuenta que me siento plena con mi vida, tal y como la llevo, y que lo bueno que la vida me ofrezca es bienvenido y a Dios le pido la fuerza y la tranquilidad suficiente para enfrentar los problemas que la vida traiga.

En fin, y entrando de lleno en mi pregunta, la respuesta se me dio como esos foquitos que salen en las caricaturas, así de repente: con mis compañeros de trabajo me llevo bien, y por primera vez me siento muy agusto, entre nosotrosotros se siente la buena vibra, compañerismo y cariño que nos tenemos, y con algunos hasta amistad y cierta complicidad cuando hacemos ciertas tareas y travesuras... Pero yo no lo siento con el chaparrito, por mas que intento.

El viernes, el chaparrito estuvo fuera de la oficina toda la mañana, y afortunadamente me dejo trabajar tranquila... :D incluso, pudimos reorganizar "el amigo secreto" por aquello de los regalos duplicados y nadie al final se quede sin regalo en el intercambio... todo muy agusto, entre las risas, bromas, resolviendo broncas laborales y hasta apapachos del Big Brother, hasta que llegó el chaparrito, con sus acostumbradas bromas (por cierto, está en campaña de conseguirme galan para el 2010) y simplemente, una de esas bromas que me toco a mi se volvio en un juego de palabras que ni el ni yo entendimos... Me sentí mal en el momento en que ambos decidimos meternos en nuestra chamba... hasta que cai en cuenta de que era mas importante disfrutar lo bueno que la vida me trae (confieso que me encantan los apapachos de Big Brother).

Esa piedrita en el zapato, que es no hacer click completamente con el chaparrito (aclaro que estoy agustisimo trabajando con el) me estaba haciendo mucho ruido, hasta que me dije: por que darle tantas vueltas y sentirme mal? Mejor recordar aquello que me hace sentir bien: y al recordar el relajo de acondicionar la oficina para esta época navideña, las bromas de los amigos, andar espiando al "amigo secreto", los apapachos y los buenos resultados de trabajo, solo me trajeron una sonrisa.

Mmmm... diria mi abuela: pa' que tanto brinco estando el suelo tan parejo... Creo que para vivir bien, necesito hacer a un lado los malos momentos de la vida... se puede¡ no es imposible¡

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